Hace una semana, una playa de Japón se convirtió en el centro de todas las miradas, tanto nacionales como internacionales, luego de la aparición de una misteriosa bola gigante de metal.
El objeto fue descubierto en la playa de Enshuhama, situada al norte de Hamamatsu, en Japón. A primera hora de la mañana, una mujer encontró esta bola gigante de metal y avisó a las autoridades para alertar del hallazgo.
Las autoridades no dudaron en colocar un cordón para impedir el acceso e investigar el origen de la bola metálica que había aparecido de la nada en la playa japonesa. Las teorías sospechas comenzaron a surgir, pues había quienes aseguraban que se trataba desde una bola de espionaje hasta una mina acuática.
El misterio sobre la aparición de la misteriosa bola gigante en una playa de Japón, finalmente fue resuelto. Las primeras conclusiones de las investigaciones apuntaron a que no se trataba de una bomba u objeto espía, ya que el interior de la bola estaba hueco.
En conclusión, el objeto provenía del mar, ya que tenía percebes pegados a la superficie de la bola, poniendo fin a los rumores y teorías que comenzaron a circular por parte de algunos medios y en redes sociales.
El jefe de la Oficina de Gestión de Costas y Ríos de Hamamatsu, Hiroyuki Yagi, aseguró que el objeto se trata simplemente de una boya perdida. Además, la bola será convertida en basura debido a su inutilidad.
El hallazgo de esta esfera sucedió en medio de las tensiones entre China y Estados Unidos ante el derribo de un supuesto globo espía que sobrevolaba zonas controladas del país norteamericano.
Japón también expresó su preocupación por el avistamiento del globo en su espacio aéreo, aunque Pekín negó todo tipo de acusaciones de espionaje.
Vía: UnoTV